Legumbre fresca, unos guisantes.
Desgranamos los guisantes, y tratamos de no comérnoslos directamente; (estaban buenísimos). Reservamos algunas de las vainas, para densificar la salsa, más tarde.
En una sartén hacemos un sofrito con un poquito de aceite y media cebolla. Fuego bajo, que la cebolla se ponga transparente. Cortamos jamón (cuanto más rico sea el jamón... mejor ;) ) y lo sofreímos junto con la cebolla. Todo muy lento, para que los sabores se mezclen.
Mientras, hemos puesto a cocer las vainas y en otra cazuela en abundante agua con sal, los guisantes. Si los hemos probado crudos, sabemos lo tiernos que son. En general, 15 minutos; si los hemos notado muy duros un poquito más. Aunque os recomiendo probarlos a los 12 y a los 15; no sea que nos pasemos. Estos en 15, geniales.
Añadimos los guisantes al sofrito y le damos vuelta con mucho cuidado, a fuego bajo, unos cinco minutos más.
Las vainas, al menos 20 o 25 minutos. Quedaran probablemente duras y habrá que pasarlas por un pasapures. No nos hace falta mucha cantidad, pero al menos 3 ó 4 cucharadas del puré resultante, nos vendrá bien para mezclar con todo el sofrito; dando densidad y más sabor.
Mezclamos, probamos el punto de sal, y a comer.
Gracias por tu comentario Donibaneko ;)
ResponderEliminarLos pongo igual de vez en cuando, pero lo de las vainas para espesar no lo he hecho nunca, aunque de todas formas casi siempre los compro congelados pues frescos los veo poco.
ResponderEliminarCuando los tenga frescos, los haré así
Hay alguna receta más de guisantes frescos... de Ferran Adriá, que tambienespesa con los mismos guisantes.
EliminarBss y gracias por tu visita.
:D