Hoy, algo sencillo, rico y que se prepara en un plis plas.
Un par de cosillas... y dejas todo listo. Te das un baño en la piscina o en el mar.
A la vuelta, en nada, acabado.
Por cierto, mes musical.
Blanki, mi experta musical, nos seleccionará vídeos para todas las recetas de este mes.
Hoy nos acompaña Becky G.
¡Venga! ¡A mover el cuerpo en la cocina!
800 gr de espinacas
16 gambas cocidas (saladas)
1 diente de ajo
250 ml de leche
1 cucharada sopera de harina
1 cucharada de mantequilla
Aceite de oliva
Pimienta
Nuez moscada
Ponemos 2-3 cucharadas de aceite en una sartén. Picamos el ajo, menudito.
Troceamos las espinacas, groseramente.
En cuanto veas que el aceite está caliente, añadimos un puñado de espinacas (bien lavadas y escurridas). Removemos un poco.
Venga, el resto de espinacas. Cocinamos 2-3 minutos, sin dejar de remover.
Vamos con la bechamel.
En una cazuela, a fuego suave, ponemos la mantequilla. En cuanto se funda, añadimos la harina. Mezclamos bien, sin dejar de remover, añadimos un poco de leche. Seguimos removiendo para que no se hagan grumos.
Añadimos el resto de leche, en dos, tres veces. Sal, pimienta y nuez moscada. Prueba sabor.
Cocinamos durante 10 minutos, sin dejar de remover.
Cubrimos las espinacas con la bechamel (no hace falta que sea totalmente). Colocamos las gambas, peladas (con cabeza) y gratinamos (horno precalentado a 200º), durante 5-6 minutos.
RIco plato, me encantan con bechamel o a la crema y con esas gambas gratinadas estupendas!! Bss!!
ResponderEliminarPues hay unas acelgas con jamón que hice el otro día..
EliminarYa os las enseñaré.
Bss
Sí k se ven buenas........un gran plato, sencillo y exquisito.
ResponderEliminarCarmenR, lo de la dieta está empezando a dar sus frutos, y com platos muy curiosos.
EliminarYa os los iré enseñando.
Bss